sábado, 28 de septiembre de 2013

miércoles, 18 de septiembre de 2013

"UNA LUNA LLENA PARA DEJAR PARTIR" (19/9/2013)


Esta luna Llena cae en el eje de “reajustes” VIR-PSC, esta vez tanto  en Trópico como en Sidéreo, culminando así una Nueva de “realineamiento” como explicamos en la entrega que le dedicamos.
Una particularidad está dada por VEN. En principio el SOL está sobre su grado de detrimento, luego en Geo hace  0 al NN Lunar y Saturno en 8 SCP, - signo de MAR, - , haciendo al grado 60 con Plutón.
En Helio  VEN 180 a MAR, de CAP a CAN, sobre los Ns G de Plutón, - indicando que su incidencia es vigente aún cuando ya SOL en LIB, el DO 22/9, comenzará a disponer de él. En LIB se darán tanto el Menguante como la Nueva próximos.

L LLENA 19/9/2013, 11h13m UT, Madrid (GEO)
BCN : AS 1 SGT / MC 17 VIR
 
 
La importancia de la Lunación en Libra, como ya es común en el decorrer de este año de encontrar astralidades notorias,  se ve magnificada porque en el Pakua la rotación de los números en esa lunación, coincidirá con la rotación anual venidera, teniendo como número de centro el 4, - unido numerológicamente a que, como en cada octubre,  el Nº del mes dentro de la tanda de los Años Personales coincide con el Nº del Año personal venidero.
L LLENA 19/9/2013, 11h13m UT, Madrid (HELIO)
BCN : AS 1 SGT / MC 17 VIR
 


Ante semejantes astralidades a venir, esta Llena de reajustes es notoriamente importante para todos, y puesto que finalmente las sociedades se componen de individuos, centraremos el análisis del cuarto en esta área, lo que quizás pueda interesar a aquellos que usan las astralidades para su vida interior.
Qué entendemos por “dejar partir”
Como es de prever, se trata de dejar atrás un equipaje sin “solarizar”,  emociones que no se digirieron y lo que ya cumplió su función para alcanzar previo un vaciado, nuevos contenidos en mejores condiciones a más de sanear los ya existentes.
Dejar partir está más de lo que se supone conectado a diferentes religiones y cultos de por el mundo y a través del tiempo. Sin ir más lejos en nuestra tradición cristiana tenemos la Confesión como forma de descarga.
En la proposición de PUNTO CERO asumimos personalmente todas las expresiones que han sido más comunes de encontrar en la historia de la Humanidad sin persona ni divinidad interpuesta.
Es así que a la Oración, la Bendición, (tratadas en otras entregas) el Perdón y al vaciado lo hacemos siempre en el ejercicio ying de los 2 que componen la proposición: el del  trabajo del cuerpo, que se hace tendido, como forma simbólica que tenemos una parte terrena.
Cada vez que se hace el ejercicio, el vaciado se hace justo al comienzo y al final. Nos centraremos sólo en el del comienzo.
 
Una forma de “dejar partir”
 Se trata de poner las 2 manos en el órgano corazón en el orden que se crea conveniente en el orden que se prefiera, poniendo los 5 dedos de c/mano juntos, cuestión de que también coincida pulgar con pulgar. Previo a ponerlas, nos aseguramos que los nudillos de una toquen simétricamente a las junturas de la que mano de encima, con conciencia que abrazamos al corazón, órgano “rey” que por varias razones tiene preeminencia sobre otros. Sus probados beneficios alcanzan a toda la Seidad.

En esa posición yaciente con el cuerpo recto, con ojos cerrados utilizaremos una variante de la respiración abdominal, la así llamada “respiración laríngea”. Se tratará de entreabrir la boca e inhalar exhalar desde este chakra de la garganta, dejando “grifo abierto” a la mente, de lo que tenga a bien sacar.

Desde luego los problemas momentáneos saldrán tanto como los permanentes, “colándose” inopinadamente sea palabras o imágenes, sones, que lejos estábamos de asociar a un vacío,  -por la simple razón que no sabemos realmente lo que es “útil” vaciar, por la tendencia a querernos en este caso vaciarnos de lo que consideramos “necesario”.

Con la práctica nuestra mente toma nota de que tiene que buscar material de descarte y si mantenemos una actitud abierta, ella sola sugiere cuándo repetir la experiencia, una especie de señal que hay que proceder a un  alivio a nuestro mundo psíquico. Es muy eficaz por ej. para reducir el coeficiente de “temor” como tal, independientemente de a qué se asocia en cada cual.

Sin descuidar en ningún momento tal tipo de respiración, podemos tomarnos el tiempo que se crea conveniente. Con la práctica, se ve que llega un momento de “stop”, que es cuando hay que acabarlo con 3 respiraciones laríngeas.

Se procede luego  a cerrar la boca y hacer 3 respiraciones abdominales profundas. Damos a nuestra manera las Gracias, que en nuestra proposición será: 9 veces Gracias!!!

Por las astralidades actuales, es un ejercicio que se puede hacer preferentemente antes de la Llena, una o quizás varias veces, pero luego también en tanto la Luna transite en Piscis.
Otro tiempo interesante es antes de una Luna Nueva, especialmente cuando LUNA atraviesa el signo en que tuvo lugar la lunación saliente.
Agregar que el ejercicio puede hacerse sentado e incluso caminando o en toda aquella situación de vida que nos permitimos una pausa.
Por el resto también es útil antes de todo tipo de meditación o tiempo dedicado a la oración.

 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 

 



 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 

lunes, 2 de septiembre de 2013

"LAS 9 BENDICIONES"

La Bendición y su contrario, la Maldición, es otra constante de la vida espiritual que se encuentra en todas las tradiciones, expresada de una manera u otra. No puede dejar de tener una gran importancia en nuestro trabajo, como en todo trabajo interior. En la actualidad, creemos cobra preeminencia.

Al bendecir, activamos la parte intermediaria para que interceda a favor de la Luz, al Maldecir, lo mismo, pero a favor de lo impuro. El que recibe la Bendición, por esta intercesión puede cambiar o mitigar un propósito, una acción que iría directo al campo de “su” purificación, o sea a las partes oscuras en que no llega la LUZ. lo contrario también es cierto: puede interceder para los valores que comporta la LUZ, prevalezcan en él.
La Bendición en esta época es prominente porque: hay muchas entidades que ayudan en las etapas de transición hacia las nuevas modalidades, - tal como sucede en todo entretiempo mayor,  ´- debido al estado de confusión en la Humanidad por los trasvases, por la deriva mítica a que se ve sometida. 
Las entidades están más resolutivas en su interseción si se encuentran con menos densidad de resistencia para posibilitar tal transición, aunque siempre está el misterio de que si actúan o no en relación a lo que veamos o comprobamos, habrá y cada vez más posibilidad de constatación, dentro de los medios o esferas que circulamos. 
Lo contrario también es cierto, ya que peligran los códigos sombríos y están más sea al ataque, sea a la defensiva, que por polaridad están respaldados por las entidades contrarias, siempre dispuestas a inclinar la Balanza de su lado con su más rápido actuar, lo que la hace más perceptible.
 
Esto fue así siempre, es la historia del “nadie está libre de pecado”, - en lo social o personal. es decir, en ciertas áreas de nosotros donde la “solaridad” no está resuelta, que se resisten a la calidez (y a veces a las llamas) de la Bendición, es difícil que ésta actúe, en otras en cambio hasta puede obrar “milagros” aunque mayormente siguen sin poderse –de inmediato,- constatar. Mediato/inmediato no pertenecen al orden del PUNTO, ya que es el dominio del AHORA sempiterno, perdurable a través de las “eternidades”, por tanto escapa a la perspectiva o expectativa del hombr@.

El que bendice entonces, es como un agente para ayudar al bendecido, - que es su función mayor, al tiempo que en los actuales momentos movilizar en él a las entidades a actuar en los nuevos transvases, redundando como es preceptivo desde siempre, en uno mismo. 

Tomada como cortesía o “buena voluntad”, la Bendición, en eso queda, tomada desde el PUNTO, “rinde” intereses, pero exige un cambio de perspectiva: volver al sentido “original” de la palabra y a la génesis de toda palabra en el hombr@. Comencemos por aquí.

Dice el Rig Veda, el más antiguo de los 4 Vedas, que desde el Vacío (el Cero) actúa el PUNTO mientras el hombr@ “haga el vacío” en él, - lo que ya nos indica el valor reverencial que merece al hacerse. Piénsese que no por nada el bendecir, está presente en todas las tradiciones. En la nuestra cristiana, la Bendición mayor va a María y al fruto de su vientre, como clara indicación de la actuación del Punto en el Cero, extensible a todos los mitos que tocan a "la inmaculada concepción": las Cosmogonías.

Desde este planteamiento, se debe “retomar” al vacío, que de hecho, es lo que hay en el interespacio de cada palabra, de cada pensamiento en todos los hombr@s, como un contínuo “rappel” de volver al origen.

La palabra ya de por sí “buena”, pasa a la mente en forma cuadrada (aunque en esencia redonda) y al mismísimo tiempo (aunque a continuación) al Corazón, dice el Rig Veda, en que toma la forma redonda, propia de la Manifestación (aunque en esencia es cuadrada), el eterno misterio de la circulación del cuadrado y la cuadración del círculo. Cuando llega a la Mente, es impersonal e incondicional, siempre la misma, pero en su aplicación, está por medio “el corazón” (de quien bendice). 

Tomada así, puedes bendecirlo todo, incluso a aquél o aquello que según tu sistema de creencias no lo merece, o te resistirías a hacerlo nunca mejor dicho, “de corazón”.

Ningún Dios pide que nos pasemos el día bendiciendo, en principio porque tiene un lado “desalentador” para las perspectivas y las “buenas intenciones” del ego, estando por medio toda la maquinaria cósmica, que se moverá desde allí en el sentido de “Si es de Dios”, como solían los astrólogos medievales finalizar sus pronósticos.
También se da la paradoja que, por dar paso al tropel de pensamientos en un momento dado, luego te das cuenta que “¡me olvidé de Bendecir!”. Esto pasa, y te puede pasar a ti si intentas esta forma de bendecir.
BENDECIR en los momentos claves del día dadas por las “puntas” del día, de hecho lógicas, porque no dejan de ser aspectos (los que habitualmente tomamos en Astrología), resonantes que vienen del la posición del Sol del comienzo del día, y el Sol lo dice todo: “Salgo para todos”, las 9 veces agregando los 9 planos, indicando así que lo hacemos a los 9 planos de esta Creación, lo que quiere decir que el que bendice, es consciente cuando en una ocasión dada bendice particularmente, que lo hace extensible a toda la Creación en que él y el bendecido, se ubican. 

Pasa también, en este mundo de las “Bendiciones”, que en un momento dado se te ocurra, a veces inopinadamente, bendecir a alguien que ves por la calle, por ejemplo, saliéndote del ego una letanía de “campos preferentes” donde quieres que “insista” la Bendición. Se debe tomar como un aviso de por qué se hizo tal privilegio, tanto de bendecir a quien lo has hecho como de los campos en que has creído “necesario” insistir. Pasa también, que una sóla vez basta con decir las 9 Bendiciones a alguien o algo en concreto. La Bendición no necesita de tu insistencia, de tu repetición, hacerlo es una señal de desconfianza de su poder, un registro cierto de no haber entendido que eres sólo un canal para el “paso” de la Bendición.

Otro efecto de la Bendición como hábito, es que contraresta en ti los efectos de lo contrario, o sea la Maldición que sería un caso extremo, pero en otra oportunidad veremos una amplia zona intermedia que utilizamos los humanos de cualquier creencia o tradición, para no llegar ni a un límite, ni al otro.

9 Bendiciones, 9 veces Gracias !!!